Con motivo de la celebración de la festividad de la Virgen del Rosario el primer fin de semana de octubre -días 3 y 4- aunque sea el 7 de este mes cuando se conmemora esta advocación mariana, este año el Novenario que la Hermandad ofrece a su titular se inicia la noche de día 25 de septiembre.

A lo largo de las nueve noches en que se desarrolla esta costumbre, tiene lugar la celebración de la Misa, con asistencia de los miembros de la Hermandad en la presidencia, así como del resto de los devotos del pueblo. Cada noche, al acabar, se canta la tradicional Salve de una manera especial: los asistentes se dividen espontáneamente en dos grupos, el de los hombres y el de las mujeres, que entonan alternativamente las distintas partes de esta  genuina oración mariana.

Según la costumbre varias veces centenaria -hay que recordar que ésta es una de las hermandades religiosas más antiguas que se conservan en Galera- el segundo día de la novena tiene lugar la reunión de los hermanos en la sacristía del templo parroquial. En ella, la Junta Directiva da cuentas de los fondos de la Hermandad y pone a disposición de los asistentes sus cargos, que son el de Presidente, Tesorero y Secretario.

Caso de haber candidaturas, se procede a una votación a mano alzada y los elegidos son proclamados nuevos cargos para el período de un año.

Normalmente, la noche del sábado previo al día de la fiesta, los componentes de la cofradía se reúnen en un grato ambiente festivo, con la participación de los músicos de la Hermandad, que amenizan la reunión con piezas de su repertorio. No pueden faltar, como es natural, las Coplas de la Aurora tan íntimamente vinculadas a esta entrañable fiesta de la tradición músico-religiosa de Galera.

La madrugada del sábado al domingo tiene lugar uno de los ritos más arraigados que se conservan en la villa: la salida a la calle de las Coplas y el Rosario de la Aurora. Pero de esta parte de la fiesta religiosa  hablaremos precisa y detalladamente en su día.