“ACTA DE ENTREGA DEL RETABLO CENTRAL DE LA IGLESIA PARROQUIAL DE GALERA UNA VEZ TERMINADO EL TRABAJO DE DECORACIÓN DEL MISMO, POR EL ESCULTOR D. FRANCISCO LÓPEZ BURGOS.

En la Villa de Galera a trece de diciembre de mil novecientos cincuenta y uno, reunidos en la Casa Consistorial de la misma los Sres. que constituyen la Junta Pro decorado el Retablo, D. Juan de Dios Pinteño Fernández como Alcalde Presidente, D. Rafael Ortiz Fernández, Cura Párroco, D. Ángel Mª Aguilera Mellado, D. Juan Molina Romero, D. Florencio Aguilera Heras, D. Luis García Millán y D. Lorenzo Serral López, de una parte y de la otra el Escultor granadino D. Francisco López Burgos, se hace oficialmente por éste la entrega del dicho Retablo a la anterior Comisión.

Desde la Casa Consistorial los anteriormente dichos Sres. se trasladaron a la Parroquia y examinada obra, que fue del agrado unánime de todos, se hacen cargo de ella y comprendiendo que el Sr. López Burgos se ha superado a lo que se le exigía y recogiendo el sentir unánime del pueblo en general, esta Comisión se cree obligada en premio a sus desvelos, darle un VOTO ESPECIALÍSIMO DE GRACIAS como galardón a su magnífico trabajo.

Así mismo esta Comisión acuerda presentar su agradecimiento a la impulsadora de esta gran obra e hija de esta Villa Dª Angustias Cabrera Carrasco, la que con ayuda del pueblo ha puesto en la cabeza de esta Iglesia una obra que la engrandece y dignifica.

Realizados estos actos se le entrega al Sr. López Burgos el último plazo del importe de lo pactado con lo cual queda totalmente liquidada esta obra, y no siendo otro el objeto de esta reunión, se dio por terminada, de la que se levanta la presente acta, que después de leída y hallada conforme, la firman todos los asistentes en el lugar y fecha al principio indicado.”

El retablo se había instalado el día 16 de agosto de 1949, en el cual se celebró la primera misa dos días después, el día 18.

La construcción del retablo corrió a cargo del escultor granadino D. Eduardo Espinosa Cuadros, el cual cobró por su obra treinta cinco mil pesetas, aportadas por Dª Angustias Cabrera Carrasco.

Su dorado -cuyas operaciones se prolongaron unos cuatro meses- estuvo a cargo del ya citado escultor D. Francisco López Burgos. El importe de su trabajo fue de ochenta y cinco mil pesetas, que fueron sufragadas por los feligreses. Su estancia en Galera y la de dos oficiales ascendió a algo más nueve mil pesetas.

En total, el retablo costó unas 150.000 pesetas.