AGRUPACIÓN MUSICAL ALLEGRO GALERA - CONCIERTO DE SANTA CECILIA - 2024
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GALERA TREINTA Y CINCO SIEGLOS DE HISTORIA (Capítulo nº 80)
EDAD MODERNA
IX.8i. SANTOS, FIESTAS Y HERMANDADES (y III)
El ayuntamiento, por su parte, culpa a las autoridades eclesiásticas recriminándoles que no se respetan las buenas y antiguas costumbres, por las cuales debía de llevarse a cabo el protocolo establecido desde antiguo, referente al lugar que debe ocupar el Ayuntamiento.
Y como don Marcelino debía de estar presionando dolido por la afrenta, sus compañeros -y no parece que amigos -del Concejo buscan la solución, ya a mediados de septiembre, consistente en construir nuevos escaños para evitar estos bochornosos espectáculos. Y así debió de hacerse, puesto que en el pleito creado -con intervención de juristas expertos en el tema- finalmente se le da la razón a los demandantes el 13 de octubre de ese mismo año.
Por lo menos, tenían asegurado el puesto en la misa del día de Año Nuevo, acompañando a las Hermandad de las Ánimas. O eso creemos. Como decíamos al principio, es en esta centuria donde se consolidan o se fundan las hermandades religiosas que han llegado hasta nosotros, sobre cuyo origen no tenemos demasiados datos. Aun así, podemos decir que en 1720 -concretamente el día 2 de junio- tiene lugar el establecimiento de la Hermandad del Santísimo Sacramento. Hasta los años 60 ó 70 del siglo XX se conservaba en la localidad un cuadro conmemorativo de esta fundación, cuya descripción es así:
«Había un cuadro, al óleo, conmemorativo de dicha fundación. En él figuraban en la parte central el Santísimo, expuesto en la Custodia y ésta en el manifestador del retablo del Altar mayor de la Parroquia. Al lado derecho, retrato al busto del Mayordomo de ese año, don Antonio Mateo de Morales, escribano de número y del Concejo de Galera, con el cetro de la Hermandad. Encima del retrato, escudo de su apellido: un moral natural en campo de oro. Al lado izquierdo, busto de su esposa, doña Benabela Rodríguez. Encima del retrato de la señora, púlpito del templo parroquial y, en actitud de predicar, retrato del beneficiado don Marcelino Fernández. En la parte baja central, cartela con una inscripción alusiva a la festividad: Don Antonio Mateo de Morales, Mayordomo del Santísimo y su esposa doña Bernabela Rodríguez. El Beneficiado don Marcelino Fernández. Año 1720»
A los treinta y dos años de su fundación con 24 vecinos de los más acaudalados del pueblo, la Hermandad había alcanzado una considerable solidez, teniendo en su patrimonio la propiedad de una casa en la calle de San Marcos de tres cuerpos de altura, un descubierto, 6 varas de fachada y 9 de fondo.
Por este mismo tiempo debió de crearse -por una evidente acción evangelizadora de los dominicos- la Hermandad de la Virgen del Rosario, a la que alude don Marcelino Fernández en su Historia de Galera. Los únicos datos que aporta son que la fundó el beneficiado Juan de Salmerón con treinta miembros. Tal vez recogiera la demostrada devoción mariana de la villa que se refleja en el Auto de Buen Gobierno de 1701, donde se alude al rezo del «rosario de Maria santisima publicamente por las calles».
Durante estos casi 300 años de existencia, la Hermandad de la Virgen del Rosario ha mantenido con bastante fuerza el espíritu para el que fue creada, basado en la difusión de sus genuinas fiestas y cantos populares, cuyas características se amplían en los APÉNDICES XIII y XIV.
La tercera de las venerables Hermandades que hemos llegado a conocer y que comienzan sus actividades en esa transición del XVII al XVIII es la de las Ánimas Benditas. Ninguna noticia segura sobre sus actividades tenemos hasta 1756, fecha que figura en uno de sus libros custodiados en el Archivo Parroquial antes de su destrucción1.
Lo mismo que la de la Virgen del Rosario, ésta de las Ánimas han mantenido sus actividades prácticamente sin cambio alguno durante siglos. A través de ellos ha creado una especial Misa de los Gozos, cuyas particularidades se exponen en el APÉNDICE XV
1 Recientemente, mucho después de haberse publicado este libro, hemos tenido acceso a un documento que indica que esta Hermandad ya estaba actuando en Galera en 1560.