En esta fecha la superioridad consigna la cantidad de diez mil reales para construcción de casas-escuela. El Cabildo autoriza a un representante suyo para que retire en Granada el dinero. Sin embargo, al no haber aportado el Ayuntamiento los recursos exigidos, el Gobernador Civil ordena devolver el presupuesto asignado (27 de noviembre de 1860). No obstante, el 23 de diciembre siguiente se vuelve a solicitar una nueva subvención para la misma finalidad. Para que no se repita lo anterior, el 27 de enero de 1861 se acuerda hacer un anteproyecto de casa para escuelas “prescindiendo del plano oficial”. No estaría la ayuda tan a la mano cuando el Ayuntamiento y los mayores contribuyentes acuerdan hacer la escuela contribuyendo con lo que puedan el 18 de noviembre de 1861. Pero dos años más tarde aún siguen las reuniones preparatorias del proyecto. Llega el mes de septiembre de 1867 y, aparte de iniciar la adquisición de libros para componer una biblioteca municipal, aún no se ha hecho nada ni se sabe nada de subvención alguna, por lo que deciden dirigirse una vez más a los estamentos correspondientes en petición de ayuda. Estas gestiones se repiten a finales de marzo de 1882, siendo ésta la última noticia que tenemos en el siglo XIX sobre la construcción de unas escuelas.