GALERA TREINTA Y CINCO SIEGLOS DE HISTORIA (Capítulo nº 94)
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- X.5. LA CONSOLIDACIÓN DE LA GALERA ACTUAL (IX) IX.5.b. ORDENACIÓN DE LA AGRICULTURA (y III) El buen funcionamient... [leer más]
DESCRIPCIÓN GEOGRÁFICA DEL TÉRMINO MUNICIPAL DE GALERA (a)
III. 1. GENERALIDADES
El Término municipal de Galera está integrado entre las siguientes coordenadas (UTM): latitud, 41 77 650, longitud 5 39 600. Forma parte del llamado altiplano norte de la provincia de Granada. Es uno de los seis municipios que constituyen la comarca de Huéscar y ocupa un territorio de 113 km2.
Sus límites territoriales están delimitados por las jurisdicciones de Huéscar al norte, la de Cúllar al sur -por donde penetra una estrecha cuña del municipio de Benamaurel en su extremo occidental-, la de Orce al este y la de Castilléjar en el oeste.
Tiene forma aproximadamente rectangular, con un ligero estrechamiento en la parte media, que viene a coincidir con la franja por donde transcurre el río de Orce y, luego, el de Castilléjar.
III.2. OROGRAFÍA
La orografía galerina se caracteriza por su aspecto fuertemente modelado por cerros, barrancos, cañadas, ramblas y vegas, entre los que se alzan llanuras de relativa extensión. La formación montañosa más destacada es la Sierra del Periate, compartida con los municipios de Orce y de Cúllar, que accidenta una pequeña parte del territorio en su esquina sureste. La altitud máxima se sitúa en este punto, que sobrepasa los 1400 metros sobre el nivel del mar. Por contra, la cota mínima se ubica en los 780 m.s.n.m. que hay en el límite con Castilléjar, precisamente a la orilla del río que se introduce en su territorio.
Las áreas menos accidentadas y, por consiguiente más llanas, son el denominado Llano de la Tejera -igualmente compartido con el municipio orcense- que se extiende por el ángulo nordeste, y el Campillo, que ocupa una buena parte del cuadrante sureste.
III. 3. HIDROGRAFÍA
Dos ríos fundamentalmente, que vienen a unirse precisamente a los pies de la población, cruzan, accidentan y fertilizan sus tierras.
El río Barbata, o Barbatas, nace en la vertiente norte de La Sagra, en Término de Puebla de don Fadrique, atraviesa de norte a sur todo el territorio oscense -bordeando la población por su extremo este- y penetra en el municipio galerino aproximadamente por el punto medio de su línea fronteriza con Huéscar, tras haberse incrementado su caudal con las aportaciones del manantial de Fuencaliente. Justamente en el punto divisorio de ambos Términos, se le incorpora por su derecha el río Santo o arroyo de Parpacén, prácticamente sin caudal por su intensivo aprovechamiento en los regadíos de las tierras circundantes. A lo largo de su recorrido, antes de llegar a Galera, el
Barbata capta las aguas de numerosos manantiales que surgen en diversos puntos de la vega, cuya existencia es posible gracias a estructuras hidráulicas establecidas en su cauce, tales como la presa del Espino.
Al llegar a Galera, se le une por la izquierda el río de Orce. Éste nace en la Cañada de Cañepla (María, Almería) y recorre de este a oeste las tierras de Orce. Un poco antes de pasar junto a la población, se le incorporan varias cañadas o arroyos, de los que se puede destacar el del Barranco del Salar. Más adelante, a la altura del cortijo de El Marchal, su caudal se ve altamente engrosado por la contribución del caudaloso manantial de Fuencaliente. Ya en tierras de Galera, en las que describe un trazado igualmente de este a oeste, recibe por su izquierda las aguas del Arroyo de La Alquería unos dos kilómetros antes de unirse al Barbata y sus aguas se ven domeñadas por una presa que las canaliza para usos agrarios y, antiguamente, motrices en varios molinos ya desaparecidos.
Inmediatamente después de unirse ambas corrientes, el curso del río gira hacia poniente y, tras superar un nuevo dique para usos industriales en las orillas de la población -fábrica harinera La Posible-, se dirige a tierras castillejaranas. Una nueva corriente de agua, del arroyo de Montoro, se une al caudal a la altura del actual cementerio. Sólo a unos dos kilómetros de Galera las aguas se alzan por medio de sencillas obras hidráulicas -presa del Botero, antiguamente llamada del Arit- para su utilización en los regadíos que se extienden sin solución de continuidad hasta Castilléjar.
En muchos puntos de su orilla derecha surgen manantiales con la particularidad de que casi todos ellos vierten aguas sulfhídricas de un fuerte olor característico. Entre ellas destaca por la abundancia de su caudal la fuente Hedionda.
Tras rebasar por su derecha el anejo de El Cortijo del Cura, el río alcanza las tierras de Castilléjar. Es de destacar que la red hidrográfica que acabamos de describir está considerada en la actualidad, incluso por la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir, como la auténtica cabecera del gran río andaluz, ya que cumple todos los criterios establecidos en cualquier red hidrográfica para determinar cuál es el río principal y cuáles sus afluentes (el nacimiento más alejado de la desembocadura, el cauce más profundo y el caudal más abundante).