GALERA TREINTA Y CINCO SIEGLOS DE HISTORIA (Capítulo nº 96)
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GALERA TREINTA Y CINCO SIEGLOS DE HISTORIA (Capítulo nº 70)
EDAD MODERNA
IX. 8g. LA AGRICULTURA (III)
La experiencia del consumo de la pámpana tuvo que resultar muy positiva para los ganaderos, quienes debieron presionar una y otra vez sobre las disposiciones establecidas en el cultivo de las viñas hasta conseguir que en la primera década del XVIII parece que se había hecho hábito el aprovechamiento de estos pastos.
Y como debió de haber abusos, surgirían numerosas quejas por parte de los agricultores. El Concejo se vio una vez más en la obligación de mediar en el conflicto dándole la razón a quienes se consideraban perjudicados. Por ello, los alcaldes y regidores
“… dixeron que por quanto suele aber mucho desorden en las biñas en echar a pastar los ganados en ellas los ganaderos luego que se a lebantado el fruto de ellas por cuio atropellamiento reziben muncho (sic) daño las vides asi en los sarmientos y … cepas como en pisotearse la tierra y quitar muchas yemas daño mui considerable digno de reparo para cuio remedio repecto de ser corta la pena de ordenanza y aberse experimentado en el año pasado de setezientos y catorce con aberlos alterado mucho probecho a todo el (ilegible) de biñas por cuia razon acordaron que qualquiera manada que se apreendiere de lanar y cabrio y zerda por la primera bez sea multada en zien rs. y por la segunda pena doblada y siendo de noche pena doblada y la terzera (ilegible)»
Mas no hemos de ver a todos los viñadores como angelicales ciudadanos, que cumplían con sus deberes responsablemente. No. Hay entre ellos quien se queja de los daños que les causan los ganados en sus plantaciones, pero, a renglón seguido, cierran sus ojos a las necesidades de la sociedad entre la que viven. La uva, como se desprende de los datos que hemos analizado, debía ser muy apreciada al ser una de las pocas frutas de que disponen en la zona. Y mucho más si tenemos en cuenta que no todas las tierras de la comarca están capacitadas para criar tal especie, lo que hace que su cotización y aprecio sean más altos.
Unidos estos ingredientes al control que se ejerce en materia de impuestos principalmente sobre todos los frutos – según hemos visto en las Tablas correspondientes- es fácil imaginar que la uva estaría estrechamente controlada para que sus cosecheros evadiesen el menor número de contribuciones posible. Pero había quien lo conseguía. Para atajar estas “exportaciones”- nada menos que a La Puebla o al Campo de Bugéjar- el Cabildo se interesa por el asunto y se escandaliza “por el poco themor de dios» que manifiestan con su insolidaria conducta algunos vecinos:
“…asi mismo dixeron que por quanto muchas personas con poco themor de dios ntro. sr. y de sus conzienzias suelen teniendo algunas biñas arrendadas y suias propias de corta entidad con el pretexto de remediarse lleban cargas de ubas a bender asi a la puebla como a campo buxejar aziendolas de noche y sin dar quenta a la justizia en que se a experimentado mucho daño a dchos. vezinos a que no es justo se de lugar para cuio remedio mandaron que el vezino que ubiere de sacar a bender ubas como dcho. es antes de cojerlas pida lizenzia a la justizia y las coja de dcha. y traiga a esta villa y rexistre la dcha. justizia a dchas. ubas y para aberlas de sacar llebe guia firmada de la justizia y essno pena de perdidas dchas. ubas y quinze dias de carzel y si se justificare no ser el lexitimo dueño de prozeder a lo que aya lugar y para que ninguno pretenda ygnoranzia se fixe edicto de todo lo contenido en este acuerdo asi en el ofizio publico como en pps ppcas (partes públicas) desta vª…»
La seda, a la que se ha hecho alusión en la introducción de este apartado, es un cultivo de gran tradición en nuestra comarca. Si recordamos la base económica de los habitantes de estas tierras en los últimos siglos de la Baja Edad Media, nos vendrá a la memoria la destacada importancia que dieron los mudéjares, primero, y los moriscos, después, a esta actividad. De la misma manera, es posible leer -y a ello se hizo alusión en su momento- que un porcentaje muy alto de las especies arbóreas que encontraron los repobladores fueron los morales y las moreras. Hasta incluso se les obliga, en las condiciones que se les imponen para la ocupación de la tierra, a establecer nuevos plantíos de esta clase de árboles.
Durante el siglo XVII no parece, al menos en lo que a nuestra demarcación territorial se refiere, que los agricultores se ocupasen mucho de este cultivo, aunque hay algunas referencias documentales a él, sobre todo en su principio. Pero, por las circunstancias que sean, una vez iniciado la segunda mitad de esta nueva centuria, aparece con bastante fuerza el cultivo de las moreras. Como producto rentable, pesa sobre él una fiscalidad muy atenta. Hemos visto, por ejemplo, cómo se recogen datos sobre su producción -y su valor- en el Catastro de Ensenada. Las noticias que sobre este negocio aparecen en diversos documentos son de cierta abundancia, pero la más completa es la que ofrecemos a continuación, ya que nos permite saber con bastante detalle quiénes eran los cosecheros y algunas otras circunstancias con ellos relacionadas.
“En la villa de Galera en veinte y siette dias del mes de junio de mill settezienttos ttreyntta y dos años esttando en el ofizio en donde se zelebran los ayuntamientos antte los Sres Juan Salzedo y Matheo Fdez alcaldes ordinarios parezio Andres Sanchez vezino desta dcha. Villa de quien sus mrs por ante mi el essno rezivieron juramto el qual en la forma acostumbrada lo izo a Dios y a una cruz y so cargo de el prometio executar lo que se le ttiene mandado en razon de rexistrero de seda que se ba a hazer y dcho. Sr asistido de los Sres Pasqual Vizentte y Pedro Candela (abreviatura ilegible que puede ser “rexistradores”) de dcho. Andres Sanchez y de Sevastian Sanchez asi mismo se paso a dar principio a dcho. rexistrero de seda en la forma y manera siguiente
Primeramente se visito la casa de Anttonia Navarro y se allo seis millares de capillo 6000
Se vissito la de Domingo Garrigos y en ella juntte con la de Juan Monttore se allo millar y medio 1500
Jose (primer apellido ilegible) Monje se le allo en su casa millar y medio 1500
En la de Tomas Ximenez tres millares 3000
Juana Pinteño millar y medio 1500
Manuel Montori se visito la casa y en ella se allo seis millares 6000
Ana de Cañas se allo y rexistro su casa medio millar 500
Damiana Martinez se le rexistraron seis millares 6000
Maria Vitoria Sanchez en su casa un millar 1000
Fº Gomez se le rexistro la seda y se le allaron seis millares 6000
Andres Sanchez un millar 1000
Andres Bermudez un millar 1000
Antonio Salzedo millar y mº (medio) 1500
Dn Joachim Thomas Romero se le registraron dos millares 2000
Francisco de Rossa Thomas dos millares 2000
Juana Fernandez mº millar 500
(Nombre ilegible) Fernandez un millar 1000
Atto Martinez medio millar 500
Vitoria Blanes millar y medio 1500
Ana Perez millar y medio 1500
Luziano Salzedo dos millares 2000
Diego Fernandez se le reconozio un millar 1000 Juan Montori millar y medio 1500
Pablo Mazizo dos millares 2000
Salvador Mtnez dos millares 2000
Fco Sanchez Hutierrez 1500
Manuel Garcia mº millar 500
Fco Mazizo (segundo apellido ilegible) dos millares 2000
El Rexior Pasqual Vizente 3000