GALERA TREINTA Y CINCO SIEGLOS DE HISTORIA (Capítulo nº 96)
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Efemérides del 27/01/1570
Asedio de Galera por don Juan de Austria.
Está finalizada la preparación de la mina. Y ese mismo día, dispuesta la carga de 45 barriles de pólvora y varios costales de trigo y sal -como ingredientes potenciadores del explosivo- en el seno de cerro, se idea una estrategia en virtud de la cual rentabilizar este ingenio, totalmente desconocido hasta ahora por los sublevados.
Para tener la seguridad de que la explosión, además de destruir los elementos arquitectónicos citados, cause el mayor número de bajas en el enemigo, se propone simular un ataque precisamente por el punto donde la carga se ha colocado. De esa manera, se espera que los moriscos se coloquen, para defender la entrada, justamente sobre la vertical de la mina. Y en ese momento prenderle fuego. Después, atacar realmente por otros puntos del cerro.
La idea es aprobada y se desarrolla la siguiente estrategia:
El primer ataque se producirá por la parte del castillo para atraer a aquella parte a los defensores. Una vez que se calcule que hay un gran número de defensores, dar fuego a la mina.
Aprovechando el pánico que indudablemente producirá un efecto tan inesperado, a la vez que la densa polvareda que la explosión levante, se desencadenará un ataque del tercio de Nápoles por su flanco, el de poniente. A tal fin se preparan 5 compañías para asaltar, 4 que estén de reserva y 7 colocadas en la retaguardia para cortar la salida a quienes salgan huyendo.
Insistentemente la artillería continúa su labor de romper las defensas y el ánimo de los cercados, aunque las municiones cada vez escasean más al no haber llegado aún el convoy de Cartagena. Naturalmente, el efecto, que desde el principio no era mucho, cada vez va siendo menor. Por ello se acuerda hacer una mina justamente debajo de la popa para volar el castillo y la muralla, que impiden un asalto con ciertas garantías de éxito en ese punto. El encargado de su ejecución es Francisco de Molina