“Sencillo, íntimo, cálido, emotivo”…, estos son algunos de los adjetivos con que han calificado algunos de los participantes el Santo Rosario que ha tenido lugar en la tarde del día de Todos los Difuntos en el cementerio municipal de Galera, a iniciativa de la Hermanas de la Misericordia que atienden esta localidad desde comienzos de curso.

Con la participación de casi medio centenar de personas, el acto –que es la primera vez que tiene lugar en este lugar de especial significación- se inició en la puerta de la capilla del recinto con unas palabras de la hermana Cristina en relación con lo que se iba a celebrar, en recuerdo de todos los difuntos que allí reposan.

En cada uno de los misterios, se recordó especialmente a los fallecidos o enterrados este año 2016 en este camposanto. Después de concluir el primer misterio, el grupo de asistentes inició un recorrido siguiendo prácticamente el perímetro de la necrópolis recitando las oraciones propias de esta costumbre católica, hasta llegar finalmente al punto de partida.

Concluido el rezo, el párroco, don Sebastián Robles, pronunció unas palabras resaltando esta práctica que se había dedicado a quienes nos precedieron y nos transmitieron estas creencias, y ahora reposan eternamente con la categoría de santos.